Cuando en mis capacitaciones sobre "Desarrollo Profesional", menciono la importancia de entrenar habilidades como liderazgo, creatividad, negociación, comunicación abierta, asertividad, pensamiento estratégico entre otras; surge una pregunta, que resulta un clásico a esta altura del partido:
-¿Se nace o se hace?-
En este punto debo admitir , que yo también me lo pregunto.
Y es justamente, a partir de esa pregunta, que sigo construyendo posibles respuestas en la medida de estudiar el tema y de conocer "algunos que nacieron", "otros que se hicieron" y los más que "nacieron y se hicieron".
Sin embargo, lo más enriquecedor de mi experiencia práctica, no fue intentar responder esa pregunta; sino reformularla:
-¿Te gusta o no te gusta?-
-¿Deseas o no hacerlo?-
La consecuencia de esto, más allá de implicar un giro de 180° en relación a dónde poner el acento, modifica nuestra posición sobre las cosas:
* Si me quedo en el "se nace o se hace", me instalo en el afuera, en creencias limitantes que condicionan de nuestras elecciones.
* Si doy un paso más, y el foco lo pongo en mi interior, me veo cara a cara con el deseo. Aparece entonces la libertad de elección; y también con sus contracaras: la insatisfacción y la frustración, con quienes debemos reconciliarnos, si realmente queremos crecer y alcanzar el llamado "éxito laboral"
Leer el Artículo Completo
Web de Encontradores
No hay comentarios:
Publicar un comentario