ADIÓS CIELO AZUL (*) Mi sentir en el Día Internacional contra la explotación sexual y trata de personas.
Cada mañana, casi como un ritual, encuentro “mi cielo azul”.
Hoy no pude, desperté en la piel de cuerpos esclavizados.
Vi el horror en mi rostro maquillado; obligado a soportar a quien pagando la esclaviza.
Escuché lo gritos de una voluntad rendida; consiente que sólo puede dejarse hacer.
¿Alguna vez te preguntaste por qué llegamos a hacerlo, a consentir que otros lo hagan, a justificarlo, a naturalizarlo, a negarlo, a deshumanizarlo?
¿Alguna vez me preguntaste cuándo, cómo, dónde, por qué y para qué nos convertimos en monstruos capaces de convivir con esto?
No puedo hoy ver mi cielo azul. Ni siquiera quiero inventármelo.
(*) Un sentir que bien lo expresa Pink Floyd con Goodbye blue sky (Adiós Cielo Azul) en la película “The Wall”